Si esto fuera una película, podríamos titularla Primates del Caribe. Pero es una historia real y su inicio se sitúa en 1919, cuando el naturalista Harold Anthony descubrió en Jamaica los restos de un primate extinto, que fue bautizado con el nombre de Xenothris mcgregori.

Se cree que dicha especie desapareció para siempre en algún momento a lo largo del siglo XVIII, y los restos que se encontraron de sus ejemplares mostraron que no se parecían a ninguna otra variedad de mono viva conocida. Tenía muy pocos dientes, y los huesos de sus piernas recordaban a los de los roedores.

Pero, ahora, un estudio realizado por equipos del London’s Natural History Museum (NHM), y del AmericanMuseum of Natural History de Nueva York, arroja un poco más de luz sobre la historia de este enigmático primate. Los investigadores han logrado tomar muestras de ADN de algunos de los restos conservados, y el análisis de los mismos ha revelado que en realidad eran una variedad de titís que había evolucionado de una forma extraña.

Los autores del estudio creen que los antepasados del Xenothris mcgregori, colonizaron las islas del Caribe, al ser arrastrados por las corrientes sobre ramas y plantas flotantes. Y explican que este mono misterioso sería en realidad un tití con unas características extrañas y únicas, fruto de haber evolucionado en una isla. Y recuerdan que no es la primera vez que en otras islas del mundo se encuentran restos de ejemplares extintos que, por los caprichos de la evolución, parecían únicos. Como, por ejemplo, elefantes enanos y pájaros gigantes.

Fuente: ScienceDaily.

Vicente Fernández López