Los peces sapo producen una serie de gruñidos y algo parecido a zumbidos con sus dos vejigas natatorias. Estos órganos que regulan su flotación se activan gracias a unos músculos capaces de moverse 200 veces por segundo, todo un récord en el reino animal.

Se sabe que su particular idioma se centra en dos aspectos básicos de su vida: buscar parejas y defender sus territorios. Pero, al intentar profundizar en esas funciones, Aaron Rice, de la Universidad de Cornell (EEUU), se encontró con una inesperada sorpresa: un tipo de sonidos que podrían matizar las expresiones con una complejidad inesperada para un pez.

Los ejemplares de la especie Batrachomoeus trispinosus objeto de su estudio emitían, junto a los sonidos “convencionales” ya conocidos, otros denominados no lineares que Rice nos explica como “una combinación de componentes armónicos y ruido”.

Nuestra voz también los produce y su función es matizar emocionalmente el mensaje. según el investigador, el mejor ejemplo para comprenderlos es el llanto de un niño. Los sonidos no lineares son esos que, cuando grita, le proporcionan la carga de alarma y urgencia comprensibles para cualquier otro ser humano. En el reino animal, también se han detectado en otros mamíferosy en aves. “En los pingüinos” añade Rice, “proporcionan a los padres una especie de firma vocal única a través de la cual pueden identificarlos sus polluelos”.

Rice nos ha enviado dos muestras del canto del este pez sapo:

[youtube]https://www.youtube.com/watch?v=MycJ9dOoCBI[/youtube]

Los tres primeros «trompeteos» suponen una advertencia a otros en una secuencia que incluye sonidos no lineares de un tipo denominado «caos determinista». A continuación, se escuchan cuatro «mugidos», que en realidad es un grito de amenaza a intrusos (algo así como un «oye tú, esta tierra es mía»), aderezado con otro fenómeno no linear llamado bifurcación.

En su próxima fase de investigación, el biólogo pretende averiguar tanto la función precisa de su descubrimiento, como su mecanismo anatómico. “Mi hipótesis es que cuando las dos vejigas natatorias funcionan en sincronía generan sonidos convencionales y, cuando la rompen, generan los sonidos no lineares”. Habrá que esperar para verificarlo.

Pilar Gil Villar