Como los rumiantes y las termitas, la vegetación expulsa a la atmósfera entre un 10 y un 30% del metano generado en el planeta. Hasta ahora se creía que solo actuaban como chimeneas para transportar el emitido por microbios anaerobios del suelo, especialmente en zonas muy húmedas. Pero Andrew Rice, de la Universidad de Portland (EEUU), ha propuesto que, en ciertas condiciones, también podrían producir el gas de efecto invernadero ellas mismas.

Pilar Gil Villar