arias prisiones en Estados Unidos y Canadá utilizan aerogeneradores para cubrir sus necesidades energéticas con esta fuente renovable, y otras han anunciado sus planes para hacerlo en breve. Una de ellas será la ubicada en el condado de Plymouth, en Massachussetts (EE.UU.). Sus responsables aseguran que cada año la factura eléctrica les supone una factura cercana al millón de dólares. Y es que como señalan, una cárcel es una gran instalación con miles de personas que siempre está en funcionamiento.

Además de la cárcel de Plymouth, otras dos instalarán en Massachussetts durante los próximos meses sistemas de energía eólica. Asimismo, prisiones de otros estados, como Virginia, Indiana, o California, se sumarán a esta iniciativa. De esta manera, seguirán los pasos del correccional federal de Victorville, en California, la primera cárcel de EE.UU. que, en 2005, instaló una turbina eólica.

En las cárceles de la vecina Canadá también quieren robarle la energía al viento. El centro penitenciario de Dorchester, en New Brunswick, instaló el pasado mes de abril de 2009 un aerogenerador, y en el centro Drumheller, en Alberta, se está construyendo una segunda. El gobierno canadiense estudia hacer lo mismo en otras diez prisiones.

Redacción QUO