El paso del asteroide Bennu por el «ojo de la cerradura» en 2135 decidirá si el impacto con la Tierra se producirá o no medio siglo más tarde

Esperar 161 años puede parecer demasiado tiempo, pero si hablamos del fin del mundo, es un tiempo extremadamente corto. El asteroide Bennu mide unos 500 metros y pesa unos 60 millones de toneladas. Es uno de los pocos cuerpos celestes cercanos a la Tierra actualmente están clasificados como un riesgo potencial para nuestro planeta.

El asteroide tiene una órbita de 1,2 años alrededor del Sol, y cruza repetidamente la trayectoria de la Tierra. Una vez cada pocos años pasa cerca de la Tierra. Esta fue una de las razones por las que la NASA eligió a Bennu como objetivo de la misión OSIRIS-Rex, una sonda que cartografió el asteroide en detalle y tomó una muestra de su superficie.

El año 2135, el año de la verdad

Un equipo del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA ha analizado los datos recogidos por la nave a lo largo de dos años y los ha utilizado para obtener nueva información sobre la trayectoria de Bennu y el riesgo de impacto. Ahora los científicos están en condiciones de predecir con mayor precisión dónde estará el asteroide cuando se acerque a la Tierra dentro de siglo y medio.

En 2135 el asteroide pasará más cerca de la Tierra que la órbita de la Luna. En principio no hay riesgo de impacto, pero la atracción gravitatoria de la Tierra podría alterar su trayectoria y hacer que se estrellara contra el planeta más adelante.

Que esto ocurra depende de si Bennu en 2135 vuela a través de uno de los «ojos de cerradura», posiciones en el espacio cercano a la Tierra en las que la gravedad terrestre podría alterar su órbita.

Riesgo de impacto

Los nuevos cálculos basados en los datos de OSIRIS-Rex muestran que Bennu pasará por alto casi con toda seguridad 24 de los 26 ojos de cerradura críticos. No obstante, los investigadores no pueden descartar por completo un impacto antes del año 2300. Según sus datos, el riesgo de que esto ocurra es del 0,057%, es decir, una posibilidad entre 1.750.

En la escala de Palermo, que refleja el riesgo de un impacto con un cuerpo celeste, Bennu queda en la posición más alta. Sólo el asteroide (29075) 1950 DA, que tiene un tamaño de aproximadamente un kilómetro, figura en una lista similar, pero sólo podría convertirse en un peligro en el año 2880.

El riesgo de impacto es del 0,057%, es decir, una posibilidad entre 1.750

Los investigadores de la NASA han señalado el 24 de septiembre de 2182 como la fecha más probable de impacto, si es que se produce. Según sus cálculos, la probabilidad de que se produzca una colisión con la Tierra en esa fecha es del 0,037%, es decir, de 1:2.700. Si este valor se mantendrá o si cambiará podría quedar claro en 2037. Esto se debe a que Bennu volverá a pasar relativamente cerca de la Tierra y, por lo tanto, sus datos orbitales podrán ser comparados una vez más con la ayuda de telescopios.

El efecto Yarkowsky

Entre los factores que entran en la evaluación de riesgos está el llamado efecto Yarkovsky. Se produce porque la radiación solar calienta los lados del asteroide en diferentes grados. Dependiendo de la rotación y la velocidad de vuelo del asteroide, éste se desvía ligeramente hacia dentro o hacia fuera por esta presión de la radiación. Esto podría ser suficiente para cambiar significativamente las probabilidades de pasar por un ojo de cerradura, y con ello el riesgo de impacto.

Otro factor que los científicos examinaron fue la propia misión OSIRIS-Rex. La nave espacial utilizó un chorro de gas durante su muestreo para agitar ligeramente la superficie del asteroide y obtener una muestra. Afortunadamente, el equipo indica que la fuerza ejercida sobre el asteroide fue ínfima comparada con otros factores, y no alteró su trayectoria.

REFERENCIA

Ephemeris and hazard assessment for near-Earth asteroid (101955) Bennu based on OSIRIS-REx data