En nuestro organismo tenemos dos tipos de grasa: la blanca, que es la que se acumula en el cuerpo y nos hace engordar, y la parda, que se quema muy fácilmente, y que se transforma en energía cuando hace mucho frío para regular la temperatura de nuestro cuerpo. Por ese motivo, los investigadores llevan años buscando alguna manera de poder convertir la grasa blanca en parda, como método para luchar contra el sobrepeso.

Y, ahora, la solución podría haberla encontrado un equipo del Salk Institute, en California. Los investigadores descubrieron que la grasa parda está vinculada con un gen llamado ERRy, mientras que ese vínculo no existe en el caso de la grasa blanca. Y, así, en un experimento realizado con ratones, a los cobayas les eliminaron la proteína que permitía la expresión de ese gen. Y el resultado fue que, cuando hacía frío, los roedores no quemaban la grasa parda y su temperatura corporal no aumentaba.

El siguiente paso de la investigación consistirá en intentar aplicar esa proteína a la grasa blanca, para ver si se producen los mismos resultados con la parda. Si el experimento tiene éxito, podría ser el primer paso para desarrollar medicamentos eficaces contra el sobrepeso.

Fuente: New Atlas.

Vicente Fernández López