Existen diversos caminos hacia la construcción de la próxima generación de ordenadores. Algunos expertos buscan materiales más eficientes para reemplazar el silicio, otros buscan el desarrollo de la computación cuántica y, algunos, se concentran en construir una máquina similar al cerebro humano. Justamente en esta vertiente se agrupa un equipo de investigadores de la Universidad Pohang de Ciencia y Tecnología de Corea.
Estos expertos han creado unos nanocables orgánicos que simulan el funcionamiento de las sinapsis biológicas. Hasta ahora, las sinapsis artificiales que se habían concebido, consumían mucha más energía que las humanas, unos 10 femtojulios. La desarrollada por el equipo coreano reduce el consumo a 1,23, muy cerca ya de su contraparte biológica. El problema, por ahora, es que nuestros “cables” son mucho más delgados, entre 20 y 40 nanometroscontra los 200 del nuevo hallazgo.
En las conclusiones del estudio, publicado en Science Advances, los expertos señalan que el próximo objetivo es reducir aún más estas medidas, conservando sus prestaciones.

Juan Scaliter