La investigación ha disparado la polémica a nivel mundial. Un grupo de científicos de laUniversidad de Medicina de Guangzhou han utilizado la técnica de edición genética conocida como CRISPR para inducir artificialmente una mutación en las células humanas y hacerlas resistentes al VIH, el virus que causa el SIDA.
Para llevar a cabo este experimento se han utilizado embriones defectuosos que no eran viables para tratamiento de fertilidad. Las leyes sobre investigación en embriones humanos son diferentes en cada país y aún no existe un consenso global al respecto.
Por un lado los críticos aseguran que se trata de una prueba inncesaria y carente de justificación médica y advirtieronacerca de las implicaciones éticas relacionadas a la modificación del genoma humano.
«Este trabajo no ofrece mucho más que evidencia anecdótica de que CRISPR funciona en embriones humanos – afirma el biólogo George Daley, del Hospital Infantil de Boston –, algo que ya sabíamos. El experimento se ha efectuado, antes de que existiera un consenso general que justifique este tipo de investigaciones por razones médicas”.
Mientras que para el especialista en bioética de la Universidad de Hokkaido, Tetsuya Ishii, “la investigaciónes simplemente jugar con embriones humanos”.
Para los responsables del artículo, publicado en la revista Nature, se trata de una investigación de “incalculable valor para el futuro. Las evaluaciones de los que están fuera del campo no tienen autoridad, y este campo seguirá evolucionando”, afirmaban en un comunicado en el periódico chino Global Times.
“Para nosotros lo más importante es completar nuestra investigación y seguir el camino en el que creemos, luego adquirir los derechos de propiedad intelectual. No tenemos que ceder ante los demás. Esto garantizará nuestra posición en la comunidad internacional. El mercado de futuro para el tratamiento de enfermedades a través de la edición de genes es incalculable.”
En declaraciones al mencionado periódico, el autor principal del artículo Fan Yong señaló que “serán los pioneros en este campo los que establezcan las normas. El propósito de este estudio fue evaluar la tecnología y establecer principios para la introducción de modificaciones genéticas precisas en embriones humanos”.
En estos momentos, en la ciudad de Tianjin, al norte de China, se está construyendo el mayor centro de clonación del mundo con planes para clonar desde mascotas a carne de ganado de la más alta calidad.

Juan Scaliter