Un equipo de astrónomos ha encontrado un vínculo inequívoco entre la presencia de agujeros negros supermasivos y la fusión de las galaxias en las que se encuentran. La conclusión del estudio, realizado mediante el uso del telescopio Hubble, demostró que casi todos galaxias que emiten chorros de plasma, también conocidos como jets o chorros relativistas, se están fusionando con otra galaxia, o lo han hecho recientemente,
Desde el disco de materia que rodea los agujeros negros estudiados, fluyen dos chorros de alta velocidad de plasma que se mueven casi a la velocidad de la luz en direcciones opuestas y en ángulo recto respecto al disco, extendiéndose miles de años luz en el espacio.
El equipo inspeccionó cinco categorías de galaxias en busca de signos visibles de fusiones recientes o en curso. «Las galaxias que albergan estos chorros relativistas – afirma Marco Chiaberge, del Space Telescope Science Institute y uno de los responsables del trabajo – emiten grandes cantidades de radiación en longitudes de onda de radio. Mediante el uso de la cámara WFC3 del Hubble (Wide Field Camera 3 o Cámara de Campo Amplio 3), se encontró que casi todas las galaxias con esta cantidad emisiones de radio, se asociaban con las fusiones.”
Pese a que los científicos han confirmado que una fusión galáctica es necesaria para que una galaxia acoja un agujero negro supermasivo, el equipo deduce que deben existir otras condicionesmás. Para Colin Norman, también co-autor del trabajo, «hay dos maneras en que las fusiones puedan afectar el agujero negro central. La primera sería un aumento en la cantidad de gas que se impulsa hacia el centro de la galaxia. La otra posibilidad es que una fusión entre dos galaxias masivas cause que dos agujeros negros de masa similar se fusionen también.”

Juan Scaliter