Aunque pueda parecer un artilugio futurista sacado del Dr. Who, este robot, Tru-D, es un auténtico exterminador de virus que puede ahorrar a la sanidad pública británica más de 245 millones de euros al año. Es barato y extremadamente efectivo. Cuesta poco más de seis euros por cada uso y utiliza rayos ultravioleta concentrados para eliminar el 99,9% de los patógenos de una habitación en solo 50 minutos.

El sistema actual para esterilizar las salas de los hospitales, el peróxido de hidrógeno vaporizado, tarda seis horas en efectuar una limpieza completa y necesita otras 24 de reposo hasta que el habitáculo puede volver a utilizarse.

Publicado para #Quonectados nº 209.

Redacción QUO