Hola. Soy Belén Márquez, arqueóloga del equipo de investigación de Pinilla del Valle. Enrique me ha pedido que os cuente cómo organizamos el trabajo en los laboratorios y aquí estoy.

Lo primero que hago cada tarde, a eso de las 17:30 horas, es imprimir los inventarios de todos los registros que se han obtenido ese día en el campo. Entonces, un primer grupo de personas se encarga de comprobar con las bolsas del material que ha salido ese día que todo lo que hemos coordenado es correcto y que ha llegado al laboratorio. En este momento, decidimos qué debe ir a Restauración y qué debe ser directamente lavado.

En Restauración se encargan de limpiar las piezas más delicadas y de consolidar todo aquello que tiene peligro de resultar dañado durante el almacenaje y el transporte al Museo. También se encargan de limpiar con tornos similares a los de los dentistas todas aquellas costras que están pegadas a las piezas y que impiden que las podamos estudiar en condiciones. Continuar leyendo

Redacción QUO