De media, la esperanza de vida femenina suele ser mayor que la masculina. Al menos, en los países con un buen nivel de vida, donde las cifras de fallecimientos durante el parto han disminuido de forma sustancial. Pero, ¿cuál es la causa de esa diferencia en la longevidad entre sexos?

La respuesta podría haberla encontrado un equipo de la Universidad de California en San Francisco y no sería otra que el hecho de tener un cromosoma X extra. Lo habitual es que las mujeres tengan una combinación de cromosomas XX, mientras que la de los hombres es XY. Y es esa X extra la que provoca beneficios de los que no gozaría el organismo de los varones.

Los investigadores realizaron un experimento con ratones, divididos en cuatro combinaciones. Ratones con cromosomas XX y ovarios; con cromosomas XY y testículos, ratones modificados para tener cromosomas XX y testículos, y otros modificados para tener cromosomas XY y ovarios.

Los resultados revelaron que aquellos ejemplares que tenían cromosomas XX vivían más, con independencia de sus órganos sexuales. Aunque los que superaban con creces el umbral de esperanza de vida media de esta especie, eran los que tenían la combinación de cromosomas XX y ovarios.

Para los investigadores, el resultado es una evidencia de que el cromosoma X es imprescindible para la vida. Y que tener uno extra ofrece más ventajas y protección. Por el contrario, el cromosoma Y típicamente masculino no resultaría tan esencial, más allá de su función para definir las características sexuales propias del varón: barba, más cantidad de vello corporal…

Fuente: IFL Science.

Vicente Fernández López