La veterana XCOR AEROSPACE acaba de incorporarse a la carrera del turismo espacial. Tradicionalmente dedicada a la fabricación de cohetes, ahora ha presentado una nave con la que espera competir con el gigante de Virgin (Space Adventures). Se trata de una aeronave suborbital que permite experimentar la ausencia de gravedad y ver las estrellas so­bre nuestra cabeza, con la Tierra y su at­mósfera por debajo. La nave se llama Lynx (lince), tiene el tamaño de un pequeño avión privado y dos asientos. El billete para la cabina costará medio millón de dólares. Su primer despegue, en 2010, será lo más parecido a una atracción de feria, ya que esperan que pueda realizar varios vuelos al día. El vehículo está diseñado para operar como los aviones comerciales. Contacto: www.xcor.com/

Redacción QUO