Los restos de una estrella supernova que nació justo antes o durante el nacimiento del sistema solar se han descubierto en un meteorito, de nombre Orgueil. La revista Astrophysical Journal recoge este hallazgo, a cargo de un grupo de investigadores liderado por Nicolas Dauphas, de la Universidad de Chicago (EE.UU.).

Los resultados sugieren que una supernova roció una masa de partículas de grano fino en la nube de gas y polvo que dio origen al sistema solar, hace 4,5 mil millones años. Diversos procesos dinámicos llevaron a los granos a ser incorporados de forma desproporcionada en meteoritos y planetas de nueva formación alrededor del sol.

Los restos, en forma de metralla microscópica (1.000 veces más pequeños que el diámetro de un cabello humano), explicarían también el misterio de las huellas químicas de mineral de cromo descubiertas en algunos planetas y asteroides. Hasta ahora se creía que éste y otros elementos y sus variaciones isotópicas se repartieron en una nube de gas y polvo que colapsó para formar el sistema solar. Sin embargo, algunos de estos componentes no habrían quedado del todo homogéneos, como se deduce de la metralla hallada.

Redacción QUO