El árbol genealógico del ser humano se sigue completando: La cueva de Malapa, a las afueras de Johannesburgo (Sudáfrica), ha desvelado los restos de dos homínidos, una hembra adulta y un joven macho – que pertenecen a una especie desconocida hasta ahora: el Australopithecus sediba.

Los restos datan de hace entre 1,95 y 1,78 millones de años, por lo que esta especie apareció un millón de años después que Lucy.Los han descubierto un equipo internacional de investigadores que publican los detalles en dos estudios de la revista Science.

Según estos trabajos, se trata de un homínido con una estructura ósea similar a la de la especie Homo más antigua, con brazos largos similares a los de un primate y largas piernas que le permitían correr, escalar y caminar de forma vertical como un humano. Los investigadores señalan que medían 1,27 metros de altura cuando murieron, aunque el macho podría haber crecido más, ya que tenía entre 9 y 13 años. El cerebro del joven estaba entre 420 y 450 centímetros cúbicos (los seres humanos tienen entre 1.200 y 1.600), pero parece más evolucionado que el de los australopithecinos.

Redacción QUO