Mira que nos tienen dicho que es bueno tener las manos limpias, matar todos aquellos gérmenes que reposan en nuestras palmas y dedos, sobre todo antes de comer, no vaya a ser que nos llevemos a la boca algo que no queramos.

Mucha gente está obsesionada con ello y son adictos al uso de geles desinfectantes para manos, tanto que los utilizan constantemente de forma diaria. Esto no va a provocar que se cojan una gran melopea, eso que quede claro. Así que si hablamos de los falsos positivos en test de alcoholemia, no será esté el problema. Donde sí habrá que tener cuidado es en los policías que hacen esos controles, porque si lo usan, los vapores que desprenden pueden llegar a “engañar” al dispositivo que usan para los tests y que muestren que estás borracho cuando ni siquiera has probado una gota de alcohol.

¿Cómo se ha llegado a esta conclusión?

Un par de investigadores del Departamento de Sanidad de Missouri (EEUU) dividieron a 65 personas en tres grupos y les hicieron soplar en un alcoholímetro del estilo que usan los policías. Antes, quienes estaban haciendo las pruebas tuvieron que limpiarse las manos con diferentes geles desinfectantes hasta que las manos estuvieran completamente secas. Luego, cada uno de ellos, tenía que sacar la boquilla de la bolsa de protección e introducirla en el dispositivo antes de hacer que la gente soplase.

Los resultados finales indicaron que un 10% de los controles dieron positivo a pesar de que los sujetos estaban sobrios. Más aún, un 31,5 % mostraba datos erróneos de medida, todo por el vapor del gel que estaba aún acumulado en las manos de quienes realizaban las pruebas. Eso sí, se demostró que si se esperaban al menos 5 minutos tras haberse limpiado las manos, los resultados eran correctos.

Así que, la próxima vez que te hagan un test, ten cuidado que no te toque un policía con las manos excesivamente desinfectadas, porque si no te puede caer una multa que no era para ti.

Fuente: Science Alert

Alberto Pascual García