Son las primeras y las únicas imágenes que existen de un sonámbulo captado en pleno episodio. Para obtenerlas, Claudio Bassetti, del Hospital Universitario de Zurich, Suiza, inyectó un marcador radiactivo en un voluntario. El marcador señala las áreas del cerebro activas en ese momento. Un escáner determinó las zonas activas y las comparó con la imagen de una noche de sueño ininterrumpido. El resultado mostró que el córtex cingulado posterior (que regula la actividad motriz y las emociones) se activó. También se descubrió que la actividad eléctrica del cerebro de los sonámbulos muestra un tipo de onda característica, que coincide con las ondas vistas en sexsomnes.

Redacción QUO