Leíste aquello de que una persona recuperó la memoria gracias a un electrodo mal colocado? Pues aquel era un paciente al que estaban tratando de obesidad. La técnica se llama “estimulación cerebral profunda” y se utiliza para muchas otras enfermedades, ya que la idea es estimular o dormir ciertos impulsos cerebrales. Dependiendo de qué se quiera promover, se ponen los electrodos en una región u otra de la cabeza. Esto tiene tres objetivos básicos: reducir la sensación de hambre, enviar al estómago una señal de saciedad y eliminar la recompensa placentera que el comer suscita en la mente de un comedor compulsivo. Ahora, la Clínica Mayo (Nueva York) está trabajando en una especie de marcapasos que paraliza el estómago al reducir las contracciones de la digestión, a base de impulsos eléctricos. Eso alargaría la sensación de saciedad.

Otros métodos que son la leche
En todo caso, las nuevas técnicas para quemar grasa sorprenden por su originalidad. Un experimento de la Universidad McCaster de Canadá ha demostrado que beber dos vasos de leche desnatada después de una sesión de gimnasia no solamente ayuda a quemar grasa, sino que aumenta la masa muscular. Y es más eficiente que otras bebidas pensadas para surtir estos efectos en los deportistas. Pero aún no saben bien qué componentes de la leche son los responsables. Otra vieja argucia contra la obesidad es la de fomentar la saciedad del paciente, y ese es el principal objetivo de la cirugía, especialmente del llamado “balón intragástrico”, que reduce el espacio disponible para comida. Pero en enero pasado, la Universidad de Buffalo (EEUU) consiguió reducir un 10% la cantidad de comida que ingerían 29 mujeres al suministrarles una bebida a base de alginato-pectina y calcio que formaba un gel en su estómago. El logro es que el compuesto retrasa la absorción de nutrientes y ralentiza el vaciado gastrointestinal, lo que alarga la sensación de saciedad. Todo lo cual está muy bien si tienes tiempo de dormir tres meses, con un balón en el estómago y bebiendo leche o un compuesto que debe de saber a rayos.

Redacción QUO