En primera instancia puede que la capacidad de planificación no parezca un superpoder tan interesante como la teletransportación, la fuerza sobrehumana o la invisibilidad. Pero es el poder que nos ha permitido ser más inteligentes. Al menos esa es la conclusión de Malcolm MacIver, de la Universidad Northwestern.

En un estudio publicado en Nature Communications, Maclver sugiere que los paisajes terrestres (árboles, arbustos, rocas y colinas) unidos al impulso primario de sobrevivir, es lo que hizo que los animales terrestres fueran más inteligentes que sus antepasados ​​acuáticos.

Todo comenzó cuando MacIver se preguntó por qué los animales terrestres tienen una visión superior a las criaturas marinas.

“Hace años cuando realizamos simulaciones para evaluar las capacidades visuales de los animales que vivieron millones de años atrás en tierra y en agua – explica Maclver en un comunicado  – . Los resultados mostraron evidencia de que justo antes de que nuestros ancestros, 380 millones de años atrás, salieran de los océanos para poblar la tierra, sus ojos se triplicaron en tamaño. Lo que este trabajo realmente nos mostró, fue que la visión, una de nuestras formas más preciadas de obtener información, pasó de ser poco importante en el agua, a darnos mayor capacidad de reacción”.

Básicamente la mejora en nuestra visión permite ganar tiempo para planificar, en lugar de reaccionar automáticamente.

Para demostrar esto, Maclver utilizó modelos computacionales, como el programa de inteligencia artificial AlphaGo, para simular interacciones depredador-presa.

Los resultados mostraron que en entornos con una mezcla de espacios abiertos y cerrados (bosques y praderas), los depredadores mejoraron su planificación, una capacidad cerebral que evolucionó en aves y mamíferos.

Al pensar en las diferentes opciones que ofrece un entorno complejo y lo que podría suceder en cada escenario posible, los animales al igual que en un juego de ajedrez, puede determinar cuál es la mejor opción.

Pero hay un problema. Si todo esto es cierto, ¿por qué ciertos mamíferos marinos como los delfines y las ballenas, son tan inteligentes? La respuesta de MacIver es que esto en realidad sirve para afirmar más aún su teoría, ya que estos animales vivieron en tierra hasta hace 50 millones de años, y probablemente habían desarrollado la capacidad de planificación antes de lanzarse a las profundidades.